Firing Up Regional Expertise: El Caribe acoge la edición inaugural del Programa de Formación de Becarios sobre APAL
La Oficina de Asuntos de Desarme de las Naciones Unidas (UNODA) ha lanzado oficialmente la edición inaugural de su Programa de Formación de Becarios sobre Control de Armas Pequeñas y Ligeras (APAL), dando inicio a un nuevo y audaz capítulo en la creación de capacidades regionales en todo el Caribe.
Del 28 de julio al 15 de agosto de 2025, diecinueve becarios de quince Estados miembros de la CARICOM se reunieron en Trinidad y Tobago, para una formación intensiva de tres semanas. La beca, impartida en estrecha colaboración con el Instituto de las Naciones Unidas para Formación Profesional e Investigaciones (UNITAR), el Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo en América Latina y el Caribe (UNLIREC) y el Gobierno de Trinidad y Tobago, combina formación jurídica, técnica y sobre el terreno para reforzar las respuestas nacionales y regionales a las amenazas que plantea la proliferación ilícita de armas pequeñas y ligeras.
Esta primera cohorte de becarios caribeños incluía a altos funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, oficiales militares, especialistas forenses, expertos en políticas y asesores jurídicos y técnicos, todos unidos por un objetivo común: reforzar los esfuerzos de control de armas en sus países de origen y en toda la región.
Una formación que va más allá del aula
El programa comenzó con un curso en línea a su propio ritmo en el que se introducían conceptos básicos sobre desarme, instrumentos internacionales y mecanismos de control de armas pequeñas y ligeras. Pero fue en Trinidad y Tobago donde el aprendizaje cobró verdadera vida.
A lo largo de tres semanas, los becarios participaron en un sólido plan de estudios que abarcaba los marcos jurídicos y políticos, la dinámica regional de las armas pequeñas y ligeras, la gestión de arsenales, la destrucción de armas, la balística forense, el control fronterizo y la prevención del tráfico ilícito, junto con temas transversales críticos como la integración de la perspectiva de género, la seguridad humana y el impacto de la violencia armada. Como complemento a este exhaustivo trabajo de curso, el Programa de Formación de Becarios contó con una serie única de visitas sobre el terreno y demostraciones en vivo que transformaron la teoría en un aprendizaje vívido y práctico.
Un viaje forense a través de las armas de fuego y la balística

En la Unidad de Balística de la Armería del Servicio de Policía de Trinidad y Tobago, los becarios observaron un disparo de prueba en vivo de un arma de fuego recuperada en un tanque de agua, un método controlado utilizado para capturar balas sin dañarlas, crucial para la comparación balística. La demostración ofreció una visión íntima de cómo se prueban y analizan las armas recuperadas en las escenas del crimen, revelando la ciencia que se esconde tras la ciencia forense y que a menudo desempeña un papel fundamental en la resolución de delitos relacionados con armas de fuego.
Durante la visita al Centro de Ciencias Forenses de Trinidad y Tobago, un experto en balística demostró cómo utilizar un microscopio de comparación para examinar vainas de cartuchos y balas disparadas. Al identificar las marcas individuales, este método permite a los investigadores vincular las armas de fuego a incidentes específicos, un paso vital en las investigaciones criminales y el enjuiciamiento.
Marcaje, rastreo y memoria

En la Armería de la Policía, los becarios presenciaron una demostración de grabado por láser, en la que se aplicaron marcas de importación a armas de fuego. Este proceso, esencial para el cumplimiento de la normativa y la mejora del rastreo, subrayó la importancia de una identificación adecuada para contrarrestar el desvío y el tráfico de armas pequeñas.
Quizás el momento más aleccionador se produjo durante una visita al Memorial de Camp Omega, donde el cabo retirado Gabriel compartió la historia de 2 soldados y 4 bomberos que perdieron la vida en una explosión en 1988 relacionada con un incendio de matorrales que prendió en un lugar de gestión de arsenales, un recordatorio aleccionador de la importancia de las prácticas seguras de Seguridad Física y Gestión de Arsenales (PSSM).
Explosivos y pericia: Una detonación controlada
En uno de los momentos más inolvidables del programa, los becarios visitaron el Campamento Omega para asistir a una demostración de campo en vivo con las Fuerzas de Defensa de Trinidad y Tobago (TTDF) sobre la eliminación segura de municiones y la detonación abierta de materiales explosivos.
Paso a paso, los becarios observaron el montaje de cargas explosivas, cables de detonación y cables de disparo, todo ello bajo estrictos protocolos de seguridad. El ejercicio puso de manifiesto la disciplina, la coordinación y la precisión técnica necesarias para manipular explosivos con seguridad.
La experiencia dejó claro que el control de las armas pequeñas y ligeras no sólo consiste en impedir que las armas lleguen a las manos equivocadas, sino también en garantizar que los materiales peligrosos se gestionen, almacenen y destruyan de forma que se protejan las vidas y las comunidades.
Desarrollo de proyectos: Convertir el conocimiento en impacto nacional

En la última semana de la formación, los becarios cambiaron el enfoque hacia el futuro. Con la orientación de los mentores, cada becario empezó a elaborar una propuesta de proyecto específica para cada país, diseñada para abordar los retos del control de las armas pequeñas y ligeras dentro de su contexto nacional e institucional. Estas iniciativas individuales informadas por la formación técnica de la beca y basadas en las necesidades nacionales servirán como anteproyectos orientados a la acción para el cambio de vuelta a casa.
Ya se centren en el refuerzo de los controles fronterizos y portuarios, en la mejora de los sistemas de registro y marcaje de armas de fuego, en la mejora de la seguridad de los arsenales o en el desarrollo de políticas nacionales sobre destrucción y rastreo de armas, los proyectos de los becarios se basan en las necesidades específicas de sus países. Juntos, reflejan cómo la beca está incubando ideas y equipando a los participantes para traducir la formación técnica en acciones prácticas y específicas para mejorar el control de las armas pequeñas y ligeras en todo el Caribe.
Un modelo para el cambio regional y global

El lanzamiento en el Caribe del Programa de Formación de Becarios SALW marca sólo el comienzo. Como parte de los esfuerzos más amplios de la UNODA para apoyar la implementación del Programa de Acción (PoA) y del Instrumento Internacional de Rastreo (ITI), la Beca busca construir una red global de especialistas en el control de armas pequeñas y livianas equipados para liderar las reformas nacionales y la cooperación regional. La próxima iteración se centrará en la región africana, con la segunda cohorte de becarios prevista del 20 de octubre al 7 de noviembre en Lomé (Togo) y Ouidah (Benín), en colaboración con el Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz y el Desarme en África (UNREC).